Desigualdades persistentes: Mujeres con TEA en el empleo público

En el ámbito del empleo público, las mujeres con Trastorno del Espectro Autista (TEA) enfrentan grandes desafíos que dificultan su plena inclusión y desarrollo profesional. Desde el acceso al diagnóstico adecuado, necesario para obtener el grado de discapacidad, hasta la limitada oferta de plazas que se ajustan a sus necesidades, cada paso del proceso resulta en una barrera adicional. Estas mujeres, compitiendo en desventaja con otros colectivos con discapacidades diferentes, encuentran un acceso desigual a oportunidades laborales en el sector público.

A esta situación se suma la falta de adaptaciones en los procesos selectivos, como exámenes y pruebas que no consideran sus necesidades específicas, creando una barrera más en la igualdad de acceso. Incluso cuando logran acceder a un puesto, el entorno laboral puede carecer de las adecuaciones y sensibilización necesarias, limitando su integración y potencial.

En el III Encuentro “Empleadas Públicas con Discapacidad: un Reto para las Administraciones Públicas”, organizado por la Asociación de Mujeres en el Sector Público, se abordaron estos temas, donde participó Ester de la Fuente, técnica de investigación de Federación Autismo Castilla-La Mancha, durante su intervención, subrayó la importancia de contar con programas de mentoría y sensibilización para que las mujeres con TEA puedan desarrollarse plenamente en sus roles. La sensibilización del personal y la creación de ambientes inclusivos y comprensivos son esenciales para asegurar una integración efectiva.

Desde nuestra entidad, apostamos por una sociedad que valore a cada persona en función de sus habilidades, brindando los apoyos necesarios para que puedan contribuir activamente. Es fundamental trabajar juntos para eliminar las barreras actuales y construir una administración pública verdaderamente inclusiva.